El Mapa Amazonía peruana 2016, elaborado por el Instituto del Bien Común, analiza la deforestación ocurrida en la región entre los años 2001 y 2015, hallando que durante ese periodo se perdieron 1 947 109 hectáreas de superficie de bosque, con la mayor deforestación ocurrida fuera de áreas naturales protegidas y territorios indígenas (1 447 429 hectáreas, equivalente al 74% de la deforestación total).
Según explicó Romina Liza durante la presentación del mapa, el estudio fue realizado por IBC en el marco del proyecto de análisis de la deforestación que desarrolla la red amazónica RAISG, y confirma una vez más que la efectividad en la conservacion y buen manejo del bosque es comparable entre los territorios indígenas y las áreas naturales protegidas. Es en vista de esta evidencia que Amazonía peruana 2016 se concentra principalmente en el análisis de estas dos categorías.
El análisis de la deforestación ocurrida en ANP (áreas naturales protegidas: áreas nacionales y regionales) en los tres periodos estudiados (2001–2005, 2006–2010 y 2011–2015) revela que la mayor deforestación se produjo en el quinquenio 2006–2010, con 9,9%, mientras que en el quinquenio 2001–2005 fue de 3,26%. Entre 2011 y 2015 se observa una caída en la deforestación: 1,63% del área total bajo régimen de ANP.
Algo similar ocurre en la categoría TI (territorios indígenas, que comprende a comunidades nativas y ribereñas y reservas indígenas o territoriales para la protección de indígenas en aislamiento), donde la deforestación registra 2,75% entre 2001 y 2005; asciende a 3,45% entre 2006 y 2010, y desciende a 2,14% en el periodo 2011–2015. Una excepción en esta categoria es el caso de los territorios indígenas no reconocidos oficialmente, que registra un aumento del 68% de deforestación en el quinquenio 2011–2015 respecto de 2006–2010. También llama la atención el caso de las propuestas de reserva indígena (aún no reconocidas por el Estado), que en los dos últimos quinquenios estudiados mantienen elevados niveles de deforestación.
Respecto de estos dos casos, Margarita Benavides, subdirectora del IBC, declaró que los datos ponen en evidencia el riesgo que corren los bosques de los territorios indígenas no reconocidos oficialmente frente a las presiones y amenazas en la Amazonía.
De otro lado, las áreas de la Amazonía peruana que no cuentan con ningún nivel de conservación, es decir que quedan fuera de ANP y TI, presentan altos niveles de deforestación en los periodos 2001–2005 y 2006–2010 (se mantienen en 36 %). Sin embargo, en el último periodo estudiado (2011–2015) el porcentaje del área deforestada es menor: 28 %.
Sobre los hallazgos reflejados en el mapa Amazonía 2016, el Ing. William Llactayo, de la Dirección general de Ordenamiento Territorial del Minam, comentó que la deforestación en la Amazonía peruana continúa siendo un gran motivo de preocupación, pues significa pérdidas de bosque que oscilan entre 100 000 y 120 000 hectáreas por año, por lo que las políticas del gobierno deben continuar buscando maneras efectivas de reducirla.
En el mismo sentido, Roxana Orrego, asesora de la Dirección Ejecutiva de Serfor, órgano del MInagri, advirtió que aparte de la deforestación, el aumento en la degradación de los bosques plantea grandes retos ambientales. Mencionó que las metas fijadas por el Perú al 2030 se proponen reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 30%, de las cuales el 70℅ proviene de acciones relacionadas a disminuir deforestación y aumentar valor del bosque en pie, lo cual también significa recuperar entre 8 y 10 millones de hectáreas deforestadas.
Según el mapa Amazonía 2016, se puede afirmar que el 48,9% de la Amazonía peruana (38 488 458 ha) corresponde a categorías que ofrecen algún grado de conservación y manejo de bosques. Se obtiene esta cifra sumando las superficies ocupadas por las áreas naturales protegidas y los territorios indígenas georreferenciados (reconocidos y no reconocidos oficialmente), e incluyendo la superposición entre ambas categorías.
Cambios recientes en la Amazonía peruana
Entre 2014 y 2016 se registra para la categoría de áreas naturales protegidas nacionales un cambio significativo: la categorización como Parque Nacional del 95% de la Zona Reservada Sierra del Divisor. En cuanto a las ANP regionales, en la región Loreto se creó el Área de Conservación Regional (ACR) Maijuna Kichwa.
Respecto a la categoría territorios indígenas, hubo un aumento de 266 000 ha en el área de la propuesta de Reserva Indígena Napo Tigre (antes propuesta de reserva territorial). Inversamente, el área de la propuesta de Reserva Indígena Cacataibo Sur sufrió un recorte de más de 16 000 ha, reduciéndose en un 35.6% de su área propuesta inicialmente.
En este periodo solo 17 comunidades nativas fueron tituladas, según información del SICNA (3 en la región Ucayali y 14 en la región Loreto).
CONVOCATORIA PARA CONSULTOR(A) LEGAL Proyecto “Science/Indigenous Knowledge Unite to Reduce Forest...