Avanza la construcción colectiva de estrategias para cuidar los humedales

Un evento realizado en Lima el pasado 24 de junio congregó en torno a la protección y gestión sostenible de los humedales a diversas instituciones del Estado, investigadores y organizaciones indígenas de varias regiones del país. El evento se desarrolló en el marco del proyecto “Estado de los Humedales en la Pan-Amazonía: riesgos y oportunidades para su protección y conservación”, que impulsa la red RAISG en colaboración con MapBiomas Amazonía y que implementa en Perú el Instituto del Bien Común (IBC).

En este espacio fueron presentados dos importantes resultados del proyecto: el Mapa de zonas prioritarias para la protección de humedales, así como un resumen de políticas públicas que recoge los principales hallazgos del proceso y recomendaciones para una mejor gestión y conservación de estos ecosistemas.

Nicole Moreno, coordinadora para Perú del Proyecto Humedales, destacó que el trabajo resulta de un proceso participativo de generación de conocimiento y construcción de estrategias orientadas a la protección y gestión de los humedales, ecosistemas que son fuente de alimentos y agua dulce para una gran diversidad de seres vivos, y que además regulan el ciclo del agua y contribuyen a la mitigación del cambio climático. 

“En el proyecto buscamos identificar humedales prioritarios desde la mirada de los actores locales, especialistas y tomadores de decisión. Esto nos permite entender su relevancia para cada territorio, así como las principales presiones y amenazas que enfrentan”, señala Moreno.

La consultora técnica, Carolina Perret, explicó que el enfoque metodológico se basa en tres macro indicadores: valor de conservación de la biodiversidad, intensidad de la actividad humana y condiciones de bienestar humano. Este análisis permite orientar la acción pública en los territorios.

El proyecto, que se implementa entre 2023 y 2026 con el apoyo de la Fundación Moore, busca generar conocimientos, construir alianzas y fortalecer las capacidades regionales para la conservación y uso sostenible de los humedales amazónicos.

Aportes desde las regiones

En meses pasados se organizaron similares encuentros en Cusco, Loreto, Madre de Dios, San Martín y Ucayali, que son las regiones con mayor concentración de humedales en la cuenca amazónica peruana. En cada región, actores clave de la sociedad civil, academia, organizaciones indígenas e instituciones públicas y privadas compartieron su preocupación frente a amenazas como la minería ilegal, la expansión agrícola o el cambio climático y contribuyeron a identificar desafíos y oportunidades para fortalecer la gestión de estos ecosistemas. Estas reflexiones constituyen valiosos insumos para la elaboración del Mapa de zonas prioritarias para la protección de humedales y del documento de políticas. 

En Madre de Dios se enfatizó la urgencia de frenar el avance de la minería ilegal, que afecta a aguajales y concesiones de reforestación, y se propuso establecer alianzas con el sector privado que gestiona concesiones con humedales, para fortalecer su conservación.

En Ucayali se resaltó la importancia de los humedales como sustento de biodiversidad, economía local y seguridad alimentaria. Sobre Yarinacocha e Imiría, ecosistemas que destacan por su valor turístico, cultural y ecológico, se mencionó que se encuentran amenazados por la expansión agrícola y los incendios. 

En Loreto, la Reserva Nacional Pacaya Samiria fue destacada como modelo de uso sostenible del aguaje. También se alertó sobre humedales como la cuenca del Nanay, fuente principal de agua para Iquitos, que enfrenta riesgos por minería ilegal. A pesar de ser un sitio Ramsar, de importancia internacional para la conservación de la diversidad biológica y el sustento de la vida humana, el Abanico del Pastaza carece de plan de manejo y seguridad jurídica, a pesar de su relevancia para comunidades indígenas.

San Martín alertó sobre la presión que ejercen el crecimiento urbano y la agricultura sobre sus humedales. La escasez de agua en temporadas secas ha incrementado su uso, provocando pérdida de cobertura y afectando su capacidad para sostener biodiversidad y brindar sus servicios ecosistémicos.

Finalmente, en Cusco, se reconoció el rol estratégico de los bofedales y las turberas en la seguridad hídrica regional y la mitigación del cambio climático. Se destacaron también áreas como Ausangate y Huarcapay por su valor cultural, turístico y ecológico. La reducción de lagunas y el retroceso de glaciares evidencian la urgencia de conservar estos ecosistemas frente al cambio climático.

 

Análisis de brechas y construcción de alianzas

Durante el mencionado evento realizado en Lima se hizo un análisis de las brechas para la protección y gestión de los humedales, destacando la importancia de trabajar en forma articulada.

“La falta de articulación es una de las principales brechas identificadas por el proyecto. Ante esta situación, para proteger eficazmente los humedales, es fundamental integrar los instrumentos legales en la planificación territorial”, señaló Miluska Carhuavilca, consultora de incidencia del proyecto. También se destacó la necesidad de mejorar la coordinación interinstitucional y el diálogo con comunidades locales e indígenas para una mejor gobernanza del agua.

Representantes del Ministerio del Ambiente y del Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP) destacaron la importancia del inventario nacional de humedales y la necesidad de continuar generando conocimiento para su conservación y gestión. “Los aguajales, por ejemplo, son clave para la biodiversidad, la economía local y la captura de carbono”, destacó Denis del Castillo del IIAP.

Hacia una agenda común por los humedales

Entre las propuestas figuran el desarrollo de guías de monitoreo, la creación de una plataforma conjunta de gestión, el fortalecimiento de capacidades técnicas regionales y locales, así como la búsqueda de financiamiento sostenible. Estas medidas buscan consolidar una agenda común para una gestión participativa, inclusiva y sostenible de los humedales, en beneficio del desarrollo territorial y el bienestar humano.